DESESPERACIÓN. La crisis habitacional golpea a los sectores más bajos que no pueden asegurarse una vivienda digna.
Un grupo de 45 familias, entre ellas mujeres embarazadas y niños, tomaron un predio ubicado en Barrio “El Mangal” de Posadas ante la dificultad de sostener alquileres o vivir en espacios prestados. Dolores Pedrozo (28) una de las voceras en la toma, dialogó con PRIMERA EDICIÓN y comentó que llegaron el último domingo hasta este lugar, un baldío ubicado en avenida Alem y Monseñor de Andrea y que según apuntaron se encuentra dentro del Registro Nacional de Barrios Populares (RENABAP), porque “no tenían a donde ir”.
“Nosotros estábamos alquilando y ya no podíamos pagar más. Como este terreno estaba en completo estado de abandono, era un baldío, decidimos con un grupo de familias entrar todos juntos”, detalló la mujer.
Una vez que ocuparon el terreno comenzaron a construir de manera muy precaria sus viviendas para poder instalarse. “Estuvimos a full trabajando porque el pronóstico marca lluvia y hay gente que tiene techos de carpa, hay menores que no tienen ropa, pañales, leche”, manifestó.
Dolores reveló que anteriormente vivía junto a su hijo en una vivienda alquilada por la chacra 189, pero que debido a los últimos aumentos no pudo seguir pagando por lo que desesperada decidió retirarse. “Yo tengo el Potenciar Trabajo, y era pagar el alquiler o comer. Nosotros estamos pidiendo asistencia a las personas que tienen la capacidad de apoyarnos”, destacó.
En este contexto, movimientos sociales se declararon en estado de alerta, exigen que se regularice la problemática de vivienda y advierten la extrema vulnerabilidad de la situación que atraviesan estas familias. “Se trata de un grupo de vecinos que estaba en una situación vulnerable, muchas son mujeres con bebés, que ante la crisis no pueden seguir alquilando, a algunas las echaron porque debían meses de renta y como este predio estaba vacío decidieron tomarlo y empezar a armar sus casitas para habitar el lugar”, reveló Lourdes Benítez del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE).
Destacó además que se encuentran acompañando a las familias en el día a día con una olla popular y con el armado de las casillas. “Son muchas mujeres, muchos niños, que están con lo puesto”, consideró. Y agregó que también están acompañando en la parte legal con el asesoramiento de un grupo de abogados “para garantizar el bienestar de estas familias y para que el Estado dé una respuesta real a esta problemática que tiene que ver con hábitat”.
Asimismo, ayer se presentaron al lugar efectivos de la Policía Décima Segunda de Posadas en representación del juez Fernando Verón, encargado de estudiar la causa, y comunicó a los ocupantes que no pueden ingresar más familias, ni materiales de construcción.
Por tal motivo, los movimientos sociales que acompañan a las familias -entre los cuales se encuentran el MTE, Nuestra América, Barrios de Pie y la CCC- declararon el estado de alerta y toma del terreno. “Estamos atentos y organizados ante cualquier intento ilegal de desalojo por parte de las autoridades. Son 45 familias en estado de vulnerabilidad que tienen derecho a vivir tranquilas. El acceso a la tierra es un derecho de todos, organizarse para garantizar un espacio digno para vivir, también lo es”, enfatizaron.
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