Roman Rabl ha corrido en las laderas de las montañas desde que era un niño.Al crecer en la región del Tirol de Austria, el corazón de los Alpes, fue la verdadera definición de un esquiador alpino apasionado.Pero a la edad de 15 años, su vida cambió drásticamente.Rabl tuvo una fuerte caída en las pistas y terminó en el hospital.“Al principio pensé que podía volver y poder esquiar como antes”, dijo Rabl.“Después de un tiempo, estaba claro que saldría del hospital en silla de ruedas, pero eso no me impidió volver a mi deporte favorito y mi pasión por el esquí alpino”.Diez meses después, el 1 de noviembre de 2007, Rabl volvió a esquiar.Tirol tiene un club especial formado por ex atletas que quieren enseñar a las personas con discapacidades a usar un monoesquí.Rabl estaba entre esos estudiantes y después de dos días de entrenamiento, se enamoró nuevamente del esquí.“Por supuesto que había imaginado mi forma de esquiar de manera diferente, pero después de un tiempo me di cuenta de que tenía un gran talento en ese deporte y surgió la idea de comenzar una carrera en Para deportes”, dijo Rabl.Roman Rabl y su banda de seguidores austriacos.#ParaAlpino pic.twitter.com/0YlDEa76FVDespués de terminar su educación, Rabl pudo recibir el estatus de atleta profesional y recibió la oferta de trabajar como oficial de aduanas con un contrato deportivo.Este es un programa especial implementado en Austria, así como en Alemania, que permite a los atletas concentrarse en su entrenamiento mientras reciben un ingreso y un seguro social, lo que los ayuda a prepararse para la vida después de retirarse de los deportes competitivos.Desde su debut competitivo en 2009, Rabl ha ganado dos medallas de plata en la clase sentado masculino en los Campeonatos del Mundo de Para esquí alpino, dos Globos de Cristal, en supercombinada y slalom gigante, y siete carreras de la Copa del Mundo.Su mayor logro hasta la fecha es ganar tres medallas de bronce en los Juegos Paralímpicos de Invierno de 2014 en Sochi.“Estoy extremadamente agradecido por el apoyo que recibí en la aduana.Sin ellos es imposible vivir tu pasión como atleta profesional a un nivel tan alto”, dijo Rabl.“Lo mejor para mí es que durante el tiempo allí, todos los atletas se comprometen a obtener una educación, por lo que no importa cuándo dejes el deporte, tienes un trabajo al que puedes acceder de inmediato”.En 2018, Roman decidió dar un paso atrás en el deporte competitivo y conseguir un nuevo trabajo.“Prácticamente perdí la alegría de esquiar después de 10 años como esquiador de élite.Además, recibí una buena oferta de trabajo de la aduana austriaca para dirigir el programa de Para deportes y comencé una licenciatura en economía.Era hora de enfocarse en algo nuevo”, dijo Rabl.En 2019 compitió en su último Campeonato Mundial en Kranjska Gora, Eslovenia, para terminar su carrera en una de sus colinas favoritas.Allí Rabl, que es especialista en velocidad, competía únicamente en eslalon y eslalon gigante porque quería minimizar el riesgo de lesiones dadas sus reducidas horas de entrenamiento.Die Ski-Alpin-Nation Österreich (@NPC_Austria) hat 11 Medaillen en Sochi gewonnen.Aquí todos los videos: http://t.co/zsL1HksMx0Poder volver a disfrutar de las pistas de forma informal después de su retiro devolvió a Rabl a sus raíces como un joven atleta apasionado.Después de un descanso de dos años del deporte competitivo, encontró la ambición de competir nuevamente y participó en el Campeonato Técnico de Austria en Carintia la primavera pasada.Satisfecho con sus resultados, Rabl y su amigo, el también esquiador austriaco Markus Gfatterhofer, quien también se retiró hace un año, formaron un plan para regresar.“En ese entonces, regresar nunca fue una opción para mí, pero al no tener entrenamiento en las puertas y obtener el resultado que obtuve en los campeonatos nacionales, comencé a pensar cada vez más en intentarlo una vez más”, dijo Rabl.“Después de terminar mis estudios de licenciatura en junio, comencé a entrenar nuevamente y ahora tuve algunos buenos días en la nieve, lo que me hace ser bastante optimista”.La Federación de Esquí del Tirol apoya financieramente a Rabl para que pueda entrenar y competir.Sus primeras carreras serán a principios de diciembre en la Copa de Europa en Pitztal, Alemania y la Copa del Mundo en Steinach am Brenner, Austria.Espera ganar puntos allí para calificar para futuros eventos.“Tengo mucha suerte de obtener el comodín para la competencia europea y de que la primera Copa del Mundo se llevará a cabo en Austria, por lo tanto, también puedo comenzar”, dijo Rabl.“Solo competiré en las disciplinas de velocidad, que son mis favoritas y donde tengo más posibilidades.Mi técnica y el amor por el riesgo definitivamente me ayudan”.En última instancia, Rabl espera competir en el Campeonato Mundial de Para Deportes de Nieve, que se llevará a cabo en Lillehammer, Noruega, del 8 al 23 de enero, y en los Juegos Paralímpicos de Invierno de Beijing 2022.Como punto culminante personal, espera con ansias las carreras de slalom gigante en St. Moritz, Suiza, donde ganó su primera carrera de la Copa del Mundo en 2013.“Mi regreso está planeado para un año, pero nunca sabes lo que viene después”, dijo Rabl.* Carina Edlinger es una campeona mundial de esquí nórdico austríaco y medallista paralímpica que estudia periodismo.Entrevistó a Roman Rabl para World Para Snow Sports.